Si vas de viaje a Berlín, capital de Alemania, seguramente visites
el Monumento a los judíos, levantado como homenaje a las víctimas del
holocausto de la II Guerra Mundial.
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| Fuente: www.berlín-tours.es |
Se trata de 2.711 bloques de hormigón (gris) con diferentes
alturas y sin ninguna descripción, situados en el corazón de Berlín. El
visitante decide por donde entra y por donde sale, a algunos les puede parecer
un cementerio (por el tamaño de los bloques) a otros simplemente un laberinto.
Seguramente el autor (Peter Eisenman, arquitecto neoyorquino de origen judío) quiso
plasmar algo sin sentido, como el holocausto que dio sentido a este monumento.
Berlín, es conocida mundialmente por ser unas de las
capitales del graffiti. Puede que levantar bloques de hormigos (de 0,2 metros a
4,7 metros) en el centro de la ciudad fuese una llamada al vandalismo. Pensando en
ello, se le decidió dar una imprimación a los bloques “anti-pintura”.
El escándalo sobrevino cuando un periodista público que la
empresa Degussa, que era la proveedora del líquido para tratar los bloques,
estuvo implicada en la producción del Zyklon B, o dicho de otra forma, era la
empresa que fabricaba el gas de las cámaras de gas que se usaban en los campos
de exterminio nazi. Las obras se paralizaron, ante el rechazo de la opinión pública
y tras varios años de polémicas finalmente se terminó construyendo. Decir que
Degussa, regalo el líquido con el que fueron tratados los bloques y pidió perdón
por el pasado.
Esto nos puede hacer pensar, ¿Qué pasa con las empresas quecolaboraron estrechamente con el nacismo? ¿Hay que descartarlas?
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| Fuente: www.historiacocina.com |
Coca-Cola, hizo Fanta para nazis. IBM y su tecnología para
computar judíos. Volkswagen, significa coche del pueblo. Bayer y Siemens con
las cámaras de gas. Hugo Boss y los trajes nazis. Los camiones nazis eran de
General Motors…
En definitiva, no podríamos condenar hoy a las empresas que
llegaron hacer en algunos casos del Nacismo su imagen.
Otras fuentes de información:
